FACULTAD DE FUSIONAR

Esta entrada no necesita muchos preámbulos, ya que las respuestas son mas que aclaratorias en todos los sentidos, no deja lugar a dudas de lo que siente y de lo que le hace sentir la música de Virginia o ella misma. Me siento muy afortunada de estar a su lado y sentir lo mismo que él.

Virginia es una fusión de música, sentimientos, fuerza, poder, vivencias personales, todo ello se traduce en temas tan elocuentes como Circus o I call your name o Hoy por ti, entre otros.

Der Blau Engel (06-05-10)

¿Qué te hace sentir la música de Virginia?

Cuando hace tiempo que no la oigo, me produce una emoción intensa hasta cortarme la respiración. Más de una vez he tenido que parar rápidamente el reproductor para tomar aire. Luego me engancha en cada nota, en cada sílaba, hasta el final de la canción. Finalmente me hace dudar de mi percepción y de que ella sea posible. Cuando la oigo con frecuencia, disfruto cada canción nota a nota y sílaba a sílaba y las entiendo con tal claridad, tanto la música como la emoción de las palabras, que tengo la impresión de que no pueden cantarse de otra manera. Hasta que ella, en el siguiente concierto, lo hace y me demuestra que si se puede. Resumiendo: placer, emoción y asombro.

¿Cómo definirías la música de Virginia?

Mas que definirla, intento explicarme cómo lo hace. Nos dijo que la canción la envuelve como en una burbuja. Mas de una vez hemos comprobado que es cierto, que las canciones se van apoderando de ella y que al final acaba como despertando de un trance. Es como si fuera una médium poseída por el espíritu del compositor y de los que la han cantado anteriormente. Pero en realidad no hay nada sobrenatural: el compositor, de alguna manera está contenido en su obra, ella ha debido oír las anteriores versiones y tiene la facultad de fusionar lo esencial de las personas que la han precedido y apoyarse en ellas. Quizás eso explica que le resulte más difícil, o que tarde más tiempo, en encontrar la forma adecuada de cantar sus canciones. Tiene que extrañarse de si misma, volverse del revés, desgarrarse y finalmente reencontrarse, antes de dejarse poseer por sus canciones como si fueran algo independiente de ella. ¿Como sus hijas? Es así como ha llegado a esa última versión impresionante de I call your name. Todo es normal: todos los grandes intérpretes de música clásica han de tener esa facultad para ir mejorando obras miles de veces interpretadas y encontrar nuevos matices. Y para expresarse a si mismos. Y muchos compositores no eran los mejores intérpretes de sus obras... pero será difícil que otra cantante mejore sus canciones.

Eso en cuanto a intérprete. Como compositora creo que busca la equivalencia, en música y palabras, al sentimiento o emoción que la empujó a componer. Es necesario un proceso de depuración continua hasta que el resultado sea una sola cosa, una obra redonda que refleje aquella emoción. Nada que ver con la elaboración de una canción de consumo. Nada que ver con un producto repetitivo ni con un estilo definido. Además, Virginia valora la diversidad y la respeta. No utilizara un solo estilo de composición si sus emociones son diversas. Y si éstas se repitieran, se obligaría a cambiarlas para no repetirse. Y si algún día encuentra su famoso estilo y se repite, yo la abandonaré. No me importa si desafina, si se olvida de la letra, si se le quiebra la voz, lo que sea. Le disculparé todo menos que me aburra, menos que se convierta en una caricatura de Virginia.

¿Qué te atrajo de ella?

Esta es la más fácil y la más difícil. Me atrajo ella. No su voz, ni su forma de cantar, ni su belleza física, sino ella misma. Puesto que llegué allá por la tercera gala, al principio no me fijé en ella. Pero sin darme cuenta, poco después solo la miraba a ella y no hay nada que me lo pueda explicar. Ni la ternura que produce, ni su encanto, ni su transparencia. Nada. Es una fascinación extraña, inexplicable, puramente mental y emocional; sin rastro de erotismo; lo cual tranquilizaría, ya que es un fenómeno que tenemos asumido, aunque tampoco comprendamos. Claro que la sensualidad se la puedes encontrar después, por sorpresa. Y seguir siendo inquietante.

Pero un buen día, uno comprende que lo que desearía de verdad es ser su amigo, o mejor, que ella fuera tu amiga. Y con esa excusa, olvidarse de todas estas elucubraciones disparatadas. Ella, creo, esta deseando ser nuestra amiga y ser querida por todos como amiga. Es entonces cuando te invade una ternura tranquila y entras en su FB, aunque nada interesante se diga. Ni falta que hace. Lo que importa es sentir esa cálida amistad, agradable y amorosa que se produce entre todos… por el solo hecho de estar a su lado.

Tanto hablar y me he olvidado de su expresividad prodigiosa, de su transparencia de niña, de su intuida pasión de mujer (mantenida al margen, salvo cuando canta), de su fuerza desde la fragilidad (cabezonería, dicen), de su encantadora torpeza (de patito), de su inteligencia que no se nota (pero que llega antes que nadie y nos arrastra a no se sabe donde) Y, ¿por qué no? de lo guapa que queda en las fotos, la condenada (sin repetir cara en ninguna, como si las estrenara) Y muchas más cosas que no recuerdo, o que aun no he descubierto.

Como diría Kanet: bruji total. Como dijo una compañera de OT: rara, rara, rara. O sea: única.